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Dos residentes de SARquavitae Monte Val contrajeron matrimonio en las instalaciones del centro residencial. Esta historia de amor comenzó hace alrededor de 3 años cuando Carmen ingresó en el centro y casi de un flechazo enamoró a Juan, soltero, al igual que ella. Una historia que no ha estado exenta de idas y venidas, dudas, miedos, preguntas sin respuestas, y sobre todo dificultades que han tenido que superar.

Este acontecimiento llenó de alegría a los residentes y profesionales de Monte Val, y fue maravilloso, sobre todo para los primeros, porque hacía mucho tiempo que no disfrutaban de un momento tan emotivo; entre marcha nupcial, felicitaciones, aplausos, besos y muestras de cariño, por parte de todo el mundo, los ya casados recorriendo los jardines saludando a los residentes, profesionales, familiares y amigos invitados.

Hubo muchas fotos, entrega de regalos, y como no, la tarta nupcial que no podía faltar; por eso todos los residentes disfrutaron de ella después de el aperitivo y la comida especial elaborada en el Centro para festejar este enlace.