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Cuidar de un huerto es uno de los talleres que más ilusión les hace a nuestros mayores. En él ven crecer, día a día, su cosecha, especialmente en verano cuando los frutos de temporada crecen con más vitalidad que nunca. Pero esta actividad no solo implica el mantenimiento del huerto y el cuidado de su cosecha, sino también, trabajar la motricidad y la coordinación, estimular la memoria o favorecer la adquisición de hábitos saludables, entre otros.

Saber cómo se debe plantar y regar cada alimento, cuándo se debe recolectar y toda la ciencia relativa, es un gran aprendizaje para nuestros mayores que se materializa de la teoría a la práctica en unos preciosos huertos que ellos mismos inician desde cero en las residencias.

Llegado el momento de la recolecta, los frutos de su trabajo son utilizados para preparar una sana y buena comida, sin duda, un buen final como resultado del trabajo y la ilusión de residentes y usuarios. Podemos encontrar huerto propio en los centros de Elda (Alicante), Conde de Orgaz (Toledo), Parque Gavilanes (Toledo), Ciudad de Badajoz (Badajoz), Remedios (Córdoba), Cocentaina (Alicante), Quijorna (Madrid), San Lázaro (Coruña), Ciudad de las Artes (Valencia), Elche l’Aljub (Alicante), Santanyí (Baleares) o Condes de Corbull (Jaén), ¡pero la verdad es que cada vez son más los que se suman a esta iniciativa!