Elisa, animadora sociocultural DomusVi Puerta Nueva

Cuando estudié el curso de Animación Sociocultural nunca pensé que podría llegar a trabajar en una residencia de personas mayores hasta que vi la oferta de trabajo en DomusVi Puerta Nueva y…¡conseguí el puesto!

Con el paso del tiempo me fui dando cuenta de la importancia de la figura de un animador en este colectivo: transmitir positivismo y alegría a todos.

Ahora en tiempos de pandemia es la clave, mantenernos con ánimo y fuerza para seguir con el día a día esperando que llegue el último y volver a la normalidad.

Me gusta mi trabajo, todos los días me esperan cosas buenas y experiencias bonitas con los residentes, por ejemplo, cuando entro en las habitaciones y recibo saludos cariñosos como: “¡Hola maja! ¿Qué nos tienes preparado para hoy?”, “¿Qué andas inventando ahora?”, como me pregunta mi amiga Manoli. E incluso las conversaciones en inglés con Ángel, siempre con una sonrisa contándome lo que más le gusta de Inglaterra.

Nos ha tocado hacer algunos cambios: reubicar actividades como la gerontogimnasia, el bingo o los bailes al pasillo. Siempre pensando en su salud pero tratando de que no pierdan actividades que para ellos son tan queridas.

Si hay algo que me gustaría destacar en estos días que nos ha tocado vivir en el centro son las vídeo llamadas, esos minutos tan emotivos entre residente y familiar donde se puede confirmar aquello de que los ojos son el reflejo del alma.

Y los posteriores comentarios de asombro de los residentes una vez se acaba la llamada: “hija, lo que nos queda por aprender con las tecnologías…”, “¡Qué de cosas hay de avanzadas!”, “¿Pero cómo sabes tanto de esto?”. O cuando se ven en la pantalla en el momento de realizar la llamada más de uno me ha dicho “Anda, ¿cuándo me has hecho esa foto?”

De todo se puede sacar algo positivo y en este caso estamos teniendo nuevas y enriquecedoras experiencias como conocer a nuestros vecinos del edificio de enfrente a la hora de aplaudir, los conciertos de nuestra amiga Sofía, que todos los domingos a las 17:30h nos regala uno de flauta y tamboril (estamos deseando conocerla en persona cuando sea posible), los dibujos de los niños del colegio que tanto nos gustan, sus vídeos, sus cartas, sus poesías…no podéis imaginar cuán agradecidos os estamos, aunque lo hemos intentado a través de algunos mensajes de nuestros mayores que os llegarían a través de vuestros profes y con algunos dibujos de nuestro residente Ángel (que algunos pajaritos nos han dicho que os han gustado mucho).

No quiero terminar sin destacar un gesto de incalculable valor para nosotros: todo el material donado por familiares, amigos e incluso por gente desconocida. Muchísimas gracias, por esto, y por todos los mensajes de ánimo que estamos recibiendo todo este tiempo.

Vendrán tiempos mejores y retomaremos esas salidas al bar a tomar un helado o un refresco, a dar un paseo por el río mientras recogemos algunas flores y, por supuesto, a tomar churros con chocolate.

¿Sabéis qué? Nos quedan muchas cosas bonitas por vivir y por ello seguimos con fuerza y actitud positiva.

Un abrazo fuerte a todos.

Elisa
DomusVi Puerta Nueva